La tribu de los astures vivió en Sanabria y en los valles y montañas de esta gran comarca aún quedan restos de este pueblo al que los romanos obligaron a adoptar las normas imperiales. Tribus diseminadas en un extenso territorio y de los que sólo se conocen sus rutinas a través de textos clásicos. El equipo de Cuentos en la Bruma sigue la huella que en la provincia de Zamora dejaron en busca del único castro que resistió al acoso romano y que aún mantiene gran parte de su estructura. En la localidad burgalesa de Rioseco un monasterio permanece oculto tras la maleza. Es Santa María de Rioseco, los monjes tuvieron que abandonar su casa hace más de un siglo, pero en sus paredes, claustro e iglesia aún queda el espíritu de una comunidad revolucionaria, avanzada y que consiguió alcanzar un gran poder.
Негізгі бет Cuentos en la bruma: Tras la pista de una tribu desaparecida
Пікірлер: 10