Tras haber recorrido el Zoológico de Morelia, mi Mateo y yo no nos quisimos quedar con las ganas de conocer algunos otros lugares emblemáticos de esta hermosa ciudad.
Fuimos al Museo del Dulce, en donde amablemente nos mostraron la gran cantidad de dulces típicos que hacen y venden ahí. Fue una experiencia muy bonita porque también me enseñaron cómo hacer el tradicional Ate de Membrillo, que por cierto, nos quedó riquísimo.
También aprovechamos para subirnos a un tranvía turístico en el que recorrimos parte del Centro Histórico y entramos al Santuario de la Virgen de Guadalupe. En él, no sólo pudimos conocer más de los edificio, personajes y leyendas que hay en esta gran ciudad, sino también, enamorarnos de toda su riqueza cultural.
Definitivamente fue uno de los viajes más bonitos que tuve el placer de hacer en 2015, sobre todo porque tuve la fortuna de que mi Mateo me acompañara. De verdad que yo les recomiendo mucho visitar Morelia y todo el estado de Michoacán, les juro que al igual que nosotros, quedarán fascinados.
Негізгі бет De paseo por la hermosa Ciudad de Morelia, Michoacán con Mateo
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