En un nuevo día de servicio, y después de haber preparado los corazones y el ambiente espiritual con una explosiva pero también sublime alabanza bajo la dirección del Salmista Julio Castellanos, el Pastor Javier Bertucci continuó con la serie titulada: "Lo que digas, te será hecho", dando inicio a la cuarta enseñanza de la misma, esta vez con el tema: "El Poder de las Simples Palabras", respaldado con numerosos versículos bíblicos que fundamentaron toda la enseñanza dominical.
Santiago 1:26: "Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana."
Quien habla diferente a lo que cree, engaña a su corazón. El corazón está diseñado para la fe, y esta capacidad de creer existe para el impío y para el cristiano, del cual se supone que éste debe saber cómo vivir y hablar, mientras que el impío actúa como cree que debería hacerlo. Ser cristiano no es religión, ser cristiano es hacer vida, por ende debemos aprender a hablar, controlando nuestras lenguas y escudriñando todo lo que decimos.
Diciendo algunas frases como "¡Me muero de hambre!" "¡Estoy cansado!", a sabiendas que en el libro del profeta Isaías, la palabra dice "... correrán y no se cansarán", es una manera de mal decir, o de mal hablar del cristiano. Entendiéndose entonces que, no sólo son tomadas como groserías o malas palabras todas las expresiones que idiomáticamente usan las personas del mundo, sino que cada confesión contraria a la Palabra de Dios es tomada como una grosería o una mala palabra. Las palabras simples tienen poder; La maldición no viene sin causa, y es muy probable que las encuentren en tus confesiones equivocadas.
¡No podemos hablar en contra de nuestra vida! No puedes hacer algo con tus manos y destruirlo con tu boca. Existen muchas formas de hablar que nos pueden dar victoria, pero también debes saber que de todo lo que oras, puedes destruirlo con las confesiones de maldiciones para tu vida. Recuerda que "lo que digas le será hecho". Jesús, el hijo de Dios, podía considerarse como un repetidor de su Padre. Hay un poder en la palabras bien sean buenas o malas.
1 Pedro 3:10: "Porque: El que quiere amar la vida Y ver días buenos, Refrene su lengua de mal, Y sus labios no hablen engaño."
Refiriéndose a la lengua, en este versículo Pedro indica que si quieres amar la vida y ver días buenos, debes frenar tu lengua. La palabra "engaño" significa una desviación de la verdad. Jesús es la verdad, si hablas en contra de la verdad, hablas en contra de Jesús. Así que refrena tu lengua para que no todos los días de tu vida te sean malos.
En una parte del Salmos 91 dice que "... te saciaré de larga vida" Indicando esto que los planes de Dios son darte buenos años de vida, no para vivirlos en sufrimiento, ¡No seas mártir para agradar a Dios! ya que la Biblia es clara al decir que la única manera de agradar a Dios no es con el hecho de ser mártir, sino con nuestra fe puesta en Él. En el libro a los Corintios dice "por lo que creí hablé". Si usted cree, usted va hablar por lo que cree. Si usted va hablar mal contra usted mismo, entonces mejor le sería callar para que todos sus días sean de bendición. Dios te quiere viviendo totalmente bien en todo lo que emprendas.
Proverbios 15:4: "La lengua apacible es árbol de vida; Mas la perversidad de ella es quebrantamiento de espíritu".
Nadie tiene el poder de maldecirme porque Dios ya me bendijo, sólo usted mismo puede maldecirse. Recuerda lo que Dios bendice, ¿Quién podrá maldecirlo? De esa manera creemos que por nuestra fe, este país será completamente cristiano.
Las palabras pueden llegar a hacer grandes contenedores de bendición, o grandes contenedores de maldición. Si estas quebrantado, la única culpable es tu lengua. Tú puedes hacer que los ángeles se regocijen con las bendiciones que salen de tu boca, ¡Busquemos excusas para creer!
Salmos 141:3: "Pon guarda a mi boca, oh Jehová; Guarda la puerta de mis labios"
Guarda la puerta de mi boca. "mejor con la boca hinchada de un golpe de un ángel, que no tener la bendición"
Proverbios 16:24:"Panal de miel son los dichos suaves; Suavidad al alma y medicina para los huesos.".
¡Todo lo que digas puede ser salud para tu cuerpo o enfermedad para tu cuerpo!
Негізгі бет El Poder de las Simples Palabras. Pastor Javier Bertucci (Domingo 12-02-2012)
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